top of page

AMOR FRATERNO

  • Foto del escritor: holyspiritorg
    holyspiritorg
  • 8 feb 2019
  • 2 Min. de lectura

Faltaba muy poco para que empezara la fiesta de la Pascua, y Jesús sabía que se acercaba el momento en que dejaría este mundo para ir a reunirse con Dios, su Padre. Él siempre había amado a sus seguidores que estaban en el mundo, y los amó de la misma manera hasta el fin. Juan 13:1

Jesús es el ejemplo perfecto de amor. Por todo lo que hizo, dijo y enseñó, así como por el sacrificio que realizó al morir por nosotros, demostró la profundidad de su amor. Hasta el fin de su vida en la tierra trató con cariño a todos, y en especial a sus discípulos.

 Los cristianos tenemos en Jesús un magnífico modelo que seguir, un modelo que nos impulsa a tratar con amor a nuestros hermanos y a toda otra persona.

¿Cómo trató Jesús a Pedro pese a su grave falta?

La noche antes de que Jesús muriera, Pedro, su propio apóstol, lo negó en tres ocasiones (Mar. 14:66-72). Pero Jesús había predicho que Pedro se arrepentiría. Y cuando el Pedro así lo hizo, lo perdonó, y más tarde le confió serias responsabilidades ¿Qué nos enseña esto? Qué aprendemos al observar la manera en que Jesús reaccionaba cuando alguien cometía una falta grave.

Tengamos la misma actitud que Jesús hacia quienes cometen un pecado.

Pedro, que fue objeto del amor de Jesús, también exhortó a sus hermanos a actuar con “obediencia a la verdad” y a tenerse “cariño fraternal sin hipocresía”. Así es, tenían que amarse los “unos a los otros intensamente desde el corazón” (1 Pedro: 1:22). 


Hoy más que nunca necesitamos desarrollar esas cualidades cristianas, pues las presiones que sufre el pueblo de Dios ya están aumentando. No podemos confiar en ningún elemento de este sistema moribundo, como bien lo demuestra la grave crisis financiera que está viviendo el mundo (1 Juan 2:15-17). Puesto que el fin está tan cerca, debemos acercarnos aún más a Jehová. Y también debemos acercarnos a nuestros hermanos y estrechar nuestros lazos de amistad con ellos.

Pablo dijo: “En amor fraternal ténganse tierno cariño unos a otros. En cuanto a mostrarse honra unos a otros, lleven la delantera” (Romanos: 12:10).

Pedro, por su parte, enfatizó este punto con las siguientes palabras: “Ante todo, tengan amor intenso unos para con otros, porque el amor cubre una multitud de pecados” (1 Pedro: 4:8).

Hemos analizado cualidades de Jesús, así como diversas maneras de imitar su forma de pensar y de actuar. Como él, seamos “de genio apacible y humilde[s] de corazón” (Mateo: 11:29). Esforcémonos también por tratar a todos con bondad, a pesar de sus imperfecciones, y obedezcamos con valor las normas de Jehová aun ante las dificultades.

Además, amemos a nuestros hermanos como los amó Cristo: “hasta el fin”. Eso es lo que nos identifica a los verdaderos cristianos (Juan 13:1,34, 35). Por lo tanto, hagamos “que nuestro amor fraternal continúe” y actuemos con decisión: usemos nuestra vida para alabar a Dios y para ayudar a los demás (Hebreo: 13:1). Jehová bendecirá todos nuestros esfuerzos.


Tema por: Gloriela Cardoza de Chacón

Comments


© 2019 por  Holy Spirit

Medio de Comunicación

Síguenos en nuestras redes sociales:

  • White Facebook Icon
  • Blanco Icono de Instagram
bottom of page